sábado, 2 de agosto de 2008

Las diferencias y los recuerdos




Aqui me hallo en casa de Mapuche y Antorso, que tienen una gatita. Su gata y mi gato tienen muchas cosas en comun....

1. Su gata es pequegna y ligera, igual que mi tigre.
2. Su gata es tranquila y pacifica, igual que el hiperactivo de mi tigre.
3. A su gata le encantan los mimos, igual, igual que a mi tigre.
4. Su gata nunca muerde ni aragna....
5. Es limpia y ordenada

Creo que a mi me ha tocado el gato mas nervioso y desapegado de Europa. Cuando veo a esta gatita carignosa, me doy cuenta de que el mio... no es tan normal. Aunque claro, el pobre ha crecido en mi casa, asi que tampoco le puedo pedir que no sea un neurotico.

Me acuerdo mucho de mi gato... por q no llama, reconcholis???

Por lo demas, compagner@s, amig@s, todo va bien. Ya he empezado la busqueda de trabajo y parece que empiezan a salirme unas cuantas clases de espagnol que vendrian muy bien. Tambien estoy preparando cartas para mandar a institutos. Parece que lo de las universidades esta imposible esta vez, asi que va a tener que ser clases particulares o institutos. Institutos, glups...

Hoy voy por fin a Londres, he quedado con Galleguigna para vernos en Stratford, donde nos recibiran mi nuevo compagnero de piso, Cuchon, y Su y su amiga. Su ha venido de Madrid una semana y me alegro mucho de verla, porque tenemos mucho de que hablar.

Hasta ahora he estado en Luton, que como siempre ha sido una bonita y nostalgica experiencia. Me conozco el centro de este pueblo como la palma de mi mano, y lo recuerdo con mucho carigno. Luton es el lugar que me dio mi primer trabajo de oficina, el primero en el que no tenia que servir pan, ni hornear patatas y montarme en un camion con los de la basura.... Llegamos a Luton con un monton de proyectos. Sin dinero y sin muebles. Estuvimos un mes y medio comiendo salchichon y chorizo con pan de molde (de comida, de desayuno, de cena..)y durmiendo en colchones en el suelo. Los armarios eran dos cajas de carton, una con su nombre y otra con el mio.

Siempre me rio recordando cuando invitamos a comer a Mapuche y su pareja de entonces a una casa sin muebles, con un colchon como sofa y una butaca sin patas al otro lado. Como no habia mesa, y al ser una ocasion especial, compramos un mantel de tela y lo pusimos en el suelo como un picnic. Lo mejor de todo es que en ningun momento la pareja de la casa pristina nos hizo sentir mal por nuestra pobreza y estuvieron siempre risuegnos y agradables. Fue una comida muy divertida.

Luton me trae muchos recuerdos tiernos.

Y para finalizar,os dare una noticia que os sorprendera. Esta lloviendo. No mucho, tampoco hace frio. Pero claro, esta de aqui estaba hace dos dias en la playa con el solecito acariciandole la nuca... y no es lo mismo...

Ultimamente estoy cansada constantemente, y no se a que se debe. Como bien, sano y equilibrado, siguiendo mis pautas. Duermo lo suficiente y estoy contenta. Lo unico a lo que lo achaco es a la falta de luz. Q pensais? Puede ser?

martes, 29 de julio de 2008

Volando voy, volando vengo




Bueno. Ya estoy aqui.

He llegado a la casa de S., novio de M. Ambos me tienen en palmitas y la cena que hizo S ayer era mucho mejor que comer en un restaurante. Y de postre, pastel de arandanos.mmmm.

Me acabo de despertar descansada y tranquila en este pueblo calmado en el que vive S. No se oye absolutamente nada, es muy muy relajante.

Lo cual contrasta con la tarde de panico que pase ayer cuando unos segnores de Clickair con cara de malos vestidos de demonios (o asi me los imagino yo) decidieron que no podia pasar mi segunda maleta (23 kilazos de maleta), porque segun normativa, puedes contratar una segunda maleta pero sin que EN TOTAL pase de 23 K., lo que estara pensado, supongo, para gente de este tipo:

- Hola buenas, venia a facturar, traigo mis dos maletas, la que llevo llena de cosas y la que llevo vacia por el gusto de llevar dos....

Voy a respirar hondo y no revivir los momentos de pura histeria que pase ayer, porque fueron demasiados. En todo caso, despues de buscar soluciones logicas sin encontrarlas, se abrio camino lo humano dentro de tanto call centre y tanto escurrir el bulto y el chico de la ventanilla se apiado de mis lagrimas y encontro una solucion menos descabellada que pagar 270 euros por una maleta. Abone una parte del sobrepeso dandole las gracias al alma candida que me habia ayudado.

Lo demas, es un continuo, una despedida triste, una llegada, mensajes, llamadas y maletas.

Es muy pronto para que me de cuenta de que no he vuelto de vacaciones. Ahora me siento muy querida, asustada, contenta, esperanzada.

PD: Los cuadros son de Marina Anaya, que expone ahora en la sala Bernot en Cadiz.