miércoles, 27 de agosto de 2008

The Elusive Job.... a little better all the time...



Bueno, las cosas salen poco a poco, lo se ... Aunque no estaría mal que se aceleraran un pelin. Ayer me entere de que oootro papel se ha retrasado y que puede que no empiece a ensenar hasta dentro de unos meses... La burocracia esquiva y sobrepasa cualquier preparación previa.

Respirar hondo...

Mientras tanto, sigo dando clases particulares y las cosas no van mal. Tengo el apoyo de mas gente de la que pensaba y casi nunca me siento sola.

Próximo objetivo: hacer del cuarto mi nidito y seguir con mi plan maestro de quitar el póster horroroso que hay colgado en el salón que me rechina cada vez que lo veo... grrrrrrr. Para ver la magnifica obra de arte, haz click aqui.

(El póster dice: Por que los hombres ponen la cerveza en la parte de abajo).

Es verlo y me vienen a la mente insultos en arameo. Dado que veo difícil que sea un tema que se pueda hablar en la casa, solo se me ocurre "unirme a ellos" y comprar un póster de uno de esos maromos cubiertos de aceite para equilibrar el salón. Puestos a "cosificarnos", cosifiquemonos todos... (ains...a lo que hemos llegado).Cualquier otra estrategia sera bienvenida.

domingo, 24 de agosto de 2008

Under the Blue Sky o un sábado cualquiera



Ayer por la mañana me desperté temprano porque tenia una clase de español que dar. Estaba despejada porque la noche anterior había decidido no ir a la fiesta a la que me habían invitado por sentirme un poco tristona e introspectiva. Cuando llevas varios días sola, empieza a notarse...

Cuando acabó la clase, me forcé a no volver a casa, a coger el metro e ir a una recoooondida exposición de fotografías de Robert Altman, fotógrafo de Rolling Stones (la revista)y conocido por capturar la esencia de los sesenta americanos.

(Ver la magnifica Acid Not Bombs)

Almorcé en la calle, en un banquito y cogí un autobús cualquiera dirección al centro.

En realidad, iba de camino a la National Gallery (pintura)y me encontré por casualidad con el British Museum, en el que decidí bajarme. Recorrí ávida las salas de Mesopotamia, Roma e India, entre otras y vi TODO lo que nunca había visto del British Museum. Es enorme y compadezco al que quiera recorrerlo en un día.

A la salida del museo, encamine mis pasos hacia la zona de tiendas, pero como suele pasar, me dio el impulso de girar a la izquierda y acabe en Covent Garden, donde, cansada, me senté a tomar algo de beber.

Al rato seguí paseando y me encontré con un teatro en el que estaba LA obra que quería ver. La obra se llama "Bajo el cielo azul" (Under the Blue Sky) y retrata de un modo bastante exagerado, las vidas de seis profesores de los cuales, por cierto, algunos dan clase en Stratford... (donde vivo).

Quería verla porque sólo estará dos semanas más y salen dos actores que me encantan. Mis amigos frikis y todo/a aquel/la al que le haya dado la brasa con la serie, conocerán a Chris O'Dowd como el irlandés de rizos de The IT Crowd.

La otra persona que sale es Catherine Tate. Esta mujer es un genio. Su programa, The Catherine Tate Show consiste en sketches a cada cual mas absurdo, como un refugio para pelirrojas en el que se las mantiene a salvo del mundo. Es absurda, pero también certera y sutil en su retrato de la sociedad británica.

Os dejo un vídeo de ella haciendo de adolescente (no os preocupéis si no lo entendéis.... Haced click aqui para verlo.

Total...

Me encuentro en la puerta del teatro, cuarenta minutos antes de que empiece la obra, pero sin dinero para la entrada y entonces se me ocurre una idea. Saco el cuaderno y escribo ¿TE SOBRA UNA ENTRADA?. Levanto el cuaderno y me dedico a enseñarselo a todo/a el/la que entrara en el teatro. Durante los cuarenta minutos siguientes me sentí un poco idiota, porque todo el mundo miraba el cartel e intentaba ignorarme. Pero estaba decidida... ¿Y si tenia suerte?...y HUBO SUERTE.Una mujer que venia sola me ofreció su entrada. A cambio yo le di 4.5, que era lo que tenia, y, aunque irrisorio para lo que cuesta una entrada, es mejor que nada.

La obra estuvo muy bien, me gusto mucho.

Después, ella y yo nos fuimos a tomar un café y a hablar sobre la vida. Nos dimos los teléfonos y los emails y quedamos en volver a vernos.

No esta mal para un sábado cualquiera, ¿no?